“Hay que motivar a las mujeres desde jóvenes para que entren en espacios de toma de decisiones”

Subdirectora de MIDAP participó en panel sobre participación femenina en la academia y los desafíos para impulsarla.

La astrónoma Manuela Zoccali, la cientista política Valeria Palanza, la psicóloga María Pía Santelices y las periodistas Isabel Plant y Paloma Ávila, fueron las protagonistas del panel de discusión ‘La Mujer y la Academia’ que organizó recientemente la Pontificia Universidad Católica de Chile. La actividad formó parte de la Tercera Feria de Investigación de Pregrado que la UC organizó para despertar la vocación científica en los estudiantes desde etapas tempranas de su formación, e “incentivar esa pasión, ese interés por la búsqueda de nuevo conocimiento”, como dijo el rector Ignacio Sánchez.

Y justamente como parte de ese objetivo, las profesionales invitadas –todas investigadoras y/o profesoras de la universidad- conversaron ante el público acerca de sus experiencias personales y los obstáculos que han debido enfrentar para encontrar sus espacios en un mundo profesional y académico donde el poder y la decisión están aún en manos de varones.

Junto a los stands de las diversas escuelas y centros de la UC que se dedican a ciencia –entre ellos MIDAP- el grupo coincidió en que, a pesar de los progresos, sigue habiendo discriminación hacia las mujeres en las universidades.

A continuación, un resumen de las principales ideas que planteó la Subdirectora de MIDAP, Dra. María Pía Santelices.

“En el ámbito de la psicología –que es el mío- el mundo es principalmente femenino. En pregrado como el 70 por ciento son mujeres. Cuando yo entré a la universidad ¡éramos como el 90 por ciento! Siempre fuimos muy críticas, el feminismo estaba presente en Psicología desde sus inicios, tenemos autoras que han desarrollado grandes teorías, entonces en nuestro mundo femenino como que estamos más empoderadas como mujeres. Donde ocurre una paradoja es que en los cargos de poder o de toma de decisiones siempre hay hombres. Es curioso: podemos ser 50 académicas, pero en la gran mayoría de los cargos directivos están hombres. Entonces hay algo que está pasando, y pienso que tenemos que estar conscientes.”

Lenguaje inclusivo: ¿todos, todas…y todes?

“Es un tema que debería partir en la infancia. Yo trabajo en infancia así que tengo muy claro cómo la Junji, por ejemplo, ha hecho esfuerzos gigantescos desde hace bastantes años en ir cambiando el lenguaje, e incluso cambió su política –se llama “Ambientes Bientratantes”- donde uno de los ejes principales es este tema. Ser cuidadoso con el lenguaje por supuesto genera realidades -una frase que se usa mucho pero que sí es efectivo- y también tiene mucho que ver con el poder y la distancia del poder, porque mientras más jerárquico sea un sistema hay más distancia de poder. Y con los niños en los jardines infantiles se está implementando ahora lo que llama ‘poder con sentido’, ‘autoridad con sentido’. Y a los niños y a las niñas se les enseña también a cuestionarse las cosas, a hacer preguntas, porque antes a un niño o niña que interrumpiera a la educadora se le decía ‘cállate y siéntate’. Ahora eso es impensable… Actualmente se les hace participar en la toma de decisiones. Para cualquier actividad que se haga se necesita el asentimiento de los pequeños. Entonces hay muchísima conciencia en la infancia, y yo creo que esta nueva política se impone un poco y cuesta ‘subirse a este nuevo carro’. A nosotros nos va a costar mucho más, pero para los niños va a ser más natural”.

Discriminación positiva por género: el riesgo de prolongarla

“Finlandia es uno de los países que tiene más equidad de género y hay mucho estudio al respecto, porque ellos se han dedicado a este tema, y es un país donde curiosamente hay más bienestar y las personas son más felices. Yo entiendo los temores, pero si uno ve los países que se han preocupado de estos temas, como Canadá, que está avanzando intensamente en esta línea, los resultados que se ven hasta ahora son todos positivos. No podemos decir lo mismo de Chile, lamentablemente. En nuestro Instituto, donde estudiamos eso, vemos que nuestro país tiene un severo problema de bienestar. Y las noticias recientes sobre desigualdad salarial en Chile señalan que las mujeres ganan el 65 por ciento en relación con los hombres, y somos el peor país de la OCDE. Claramente podríamos hacer incluso un link entre esta desigualdad social y la infelicidad de las personas”.

Masa crítica femenina para lograr cambios

“La masa crítica es fundamental pero no suficiente. Ya tenemos ejemplos de eso: en nuestra escuela [de Psicología UC] somos más mujeres que hombres, pero si uno ve la historia de la escuela, muy mayoritariamente las personas que toman decisiones han sido hombres. Entonces, la masa crítica sí, pero además necesitamos voluntad, estar muy conscientes, y también motivar a las mujeres desde jóvenes el interés por entrar en espacios de toma de decisiones, porque hay que pensar que es una comunidad y que todos tenemos que tomar en algún momento un rol, la dirección de algo. Creo que también hay que ir motivándolo desde antes.”